Caro para el equipamiento básico de la habitación (cama, mesitas, perchas, TV y baño). Barato en comparación a los desorbitados precios en que se mueven los hoteles en España después de la pandemia. Lo mejor: la ubicación (facil de llegar y de aparcar en la calle -tiene parking propio en todo caso, pagando claro), la cercanía de metro y bus (a 100 m.) y hay bares/restaurantes aceptables. L@s recepcionistas de 10 (bueno, 9.5 que por la noche, sobre las 1.00, nos tuvieron a 3 personas como 3 minutos esperando para abrir la puerta del hotel, que estaba cerrada (no sé si es normal habitual). No es por los 3 minutos, es que hacia mucho frío esa noche!! Lo peor: ciertos detalles, sin ser problemas graves, como la TV, que no cambiaba de canales o no sintonizaba de repente ningún canal. Lo recomiendo para viajes rápidos y que requieran estar bien comunicado.